La zona de los Dolomitas, al norte de Italia, se ha puesto de moda. Los paisajes son tan bellos que todo el mundo quiere ir. Apto para montañer@s y dominguer@s, familias con niñ@s y hasta para perr@s.
Como solemos hacer, vamos a hablar de lo que hicimos, de lo que nos dio tiempo a ver y a hacer, y te explicaremos el porqué lo hicimos así. Puede que no sea la mejor ruta, pero lo que si podemos asegurar es que nos encantó. Hay más de lo que hablamos aquí. Hay más iglesias, más lagos, más montañas…
¿Habríamos cambiado algo? Puede que si, pero al final de eso se trata. De ver paisajes, pasear y desconectar. De no llevarlo todo planificado al 100% e improvisar un poco. Aquí te traemos lo que para nosotros fue lo mejor 😀.
Preparación
Como puedes ver en el mapa, hicimos una ruta “circular”. Llegamos a Bérgamo un viernes noche, dormimos cerca del aeropuerto, recogimos el coche de alquiler el sábado por la mañana y lo devolvimos el lunes tarde/noche. Por eso decimos 3 días. 3 días completos de ruta.
Hay unas 3h entre el aeropuerto de Bérgamo hasta los primeros puntos de la zona de los Dolomitas, así que tómatelo con calma.
Iglesias de los Dolomitas
Chiesa di San Constantino
La chiesa di San Constantino está a unas 3h del aeropuerto de Bérgamo. Según Google pone 2 horas 44 minutos, pero si paras a descansar, a estirar las piernas, wc, beber algo… se te va a las 3h. Ve pendiente a Google Maps por si hay tráfico. Nosotros cambiamos de ruta porque hubo un momento que marcó 30 minutos extra de los programados inicialmente.
Esta pequeña iglesia está situada en un pequeño monte, rodeada de vacas y con las montañas de fondo. Es una primera toma de contacto con la zona espectacular. Ya empiezas a respirar verde (y un poco a caca de vaca).
Aunque esta iglesia es del s.XIII, ha sido remodelada con el paso de los años y tiene diferentes estilos arquitectónicos. Hay aparcamiento gratuito justo en el camino de delante.
Chiesa di San Valentino
La chiesa si San Valentino es una de las más bonitas (para nosotros) y una de las más complicadas de visitar a partes iguales. El verde del monte, la iglesia y las montañas de fondo… este lugar te enamorará.
Te dejamos en el mapa el lugar donde aparcamos. Aunque también te aviso que seguro que no estaba bien aparcado. Allá tu… El problema de Google Maps es que usa cualquier calle, y nos acabamos metiendo en propiedades privadas… No había carteles de “no aparcar” ni nada, pero se veía… Seguramente lo que se tiene que hacer es aparcar en medio del pueblo y luego subir andando hasta la iglesia.
Otro de los motivos de la complicación, es que en la carretera, justo en la rotonda con los carteles de St. Valentino a la derecha, había unos carteles que parecía poner “prohibido circular entre las 09.00h y las 17.00h“. Digo parecía porque estaba en alemán (aunque estemos en Italia, la frontera austríaca está muy cerca), pero la señal de prohibido circular es universal.
El problema es que pasaban muchos coches y claro, nosotros al ver que todos pasaban… pues mal ponte. A rezar que no pusieran multa, aunque como luego también aparcamos mal… fue un cúmulo de rezos.
Nuestra visita coincidió con una bajada de animales. Era algo tradicional. Mucha gente vestida con trajes típicos, vacas ornamentadas, carros… se juntaban con los coches, que sorprendidos se echaban a un lado de la carretera para dejarlas pasar. Por suerte nosotros llegamos a un cruce antes de encontrarnos a las vacas y pudimos aparcar para ver ese espectáculo animal.
Lagos de los Dolomitas
TODOS los lagos que visitamos excepto el lago di Landro tienen aparcamiento de pago. La mayoría son de “zona azul” aunque hay alguno con barrera. Los precios varían un poco, pero rondan los 2€/hora.
Lago di Braies
El lago de los lagos. Seguro que lo conoces si entras al mundillo instagram. Nosotros nos alojamos a 15 minutos del lago para poder ir a primera hora de la mañana, sin tener que pegarnos un madrugón y tener que conducir mucho. Nos alojamos en el pueblo de Villabassa y este es nuestro hotel.
Llegamos al lago a las 08.15h de la mañana y ya había gente. Poca, pero había. Nos encontramos hasta una sesión de fotos de algunos “influencers”, que iban con 2 cámaras y haciendo varias posturas imposibles.
Hay una ruta circular que nosotros hicimos en 1 horita o así. Puedes tardar más o menos y no es nada complicada. Hay un tramo que si hay escaleras y tienes que subir y bajar, pero bueno, nada del otro mundo. Si empiezas la ruta a la izquierda del embarcadero, las escaleras las harás al empezar la vuelta. Si empiezas por el lado derecho del embarcadero (hay una pequeña iglesia), las escaleras las encontrarás al final.
Aunque tardamos 1 horita en dar la vuelta, entre que paras a hacer fotos, descansar, respirar, en definitiva, disfrutar, salimos de allí a las 10.30h y ya estaba llenísimo de gente. Si quieres fotos estando más o menos a solas, madruga 🙂 .
Lago di Dobbiaca
El lago di Dobbiaca nos sorprendió bastante. En google parecía pequeñito, y aunque no es tan grande (ni tan lleno de gente) como el lago di Braies, también tiene su encanto. Es un punto intermedio entre el lado de Braies y el lago di Landro. Los hicimos uno detrás de otro de camino a Tre Cime (aunque luego cambiamos de ruta).
Hay aparcamiento de pago y también tiene una ruta circular que rodea todo el lago.
Lago di Landro
En el lago di Landro hicimos parada técnica. Había mucha parte seca (podías andar por la parte seca del lago) y aprovechamos para comer en el restaurante que hay delante. Está muy cerca de Tre Cime y allí, al ver el tiempo como estaba, empezamos a dudar de subir o no.
Yo, al ver que las cimas estaban nevadas ya me empecé a negar (por un incidente en la nieve años atrás) pero bueno, un poco más abajo verás porqué no fuimos al final.
Aparcamiento gratuito. Tanto en el restaurante como delante del lago.
Lago di Misurina
El lago di Misurina fue la primera parada después de descartar Tre Cime. Está muy cerquita y de camino en la ruta circular que estábamos haciendo. Si vas en ruta y ya has visto varios lagos (como era nuestro caso), no es una parada imprescindible. Es bonito con las montañas de fondo, pero como los otros. Además, en este caso hay que pagar si o si en los parking de zona azul.
Lago di Carezza
El último lago que vimos antes de ir hacia Bolzano a comer y hasta Sirmione y el aeropuerto. Y tenemos que decir que no fue el mejor ni de lejos… Toda la zona de alrededor está en obras y el lago estaba medio lleno (o medio vacío). Por ese motivo no lo disfrutamos tanto. Está bien ir, la zona igualmente es bonita y viene de paso. Así que, porqué no parar.
Montañas con vistas en los Dolomitas
Val di Funes
De por si, Val di Funes tiene unas vistas de los Dolomitas espectaculares. Lo que pasa, que cuando nosotros fuimos, allí hacían el Speckfest. Por si no lo sabes, el speck es una especie de “jamón fumado”. Al estar la frontera austríaca tan cerca, esa zona se la conoce como el Tirol del Sur. Podríamos decir que este festival tirolés mezcla comida y cerveza a partes iguales.
Lo del Speckfest no fue programado. Coincidió que se hacía justo ese fin de semana y como igualmente queríamos ir a ver la Val di Funes, quisimos ir si o si. Además nos iba de camino hacia nuestro hotel.
Seguramente, es de los puntos más fotogénicos para apreciar los Dolomitas. Sin ninguna duda se merece una visita.
Passo Giau
Al no subir a Tre Cime, queríamos ir a una alternativa si o si. Antes de iniciar el viaje, al poner todos los puntos en el mapa, teníamos algunos puntos obligados y otros opcionales. Passo Giau pasó de ser un opcional a ser un obligado.
No tienes que pagar nada por aparcar y también estás en la cima de la montaña para aprovechar las vistas (en nuestro caso las vistas fueron menores por culpa de la niebla).
¡ATENCIÓN! Al ser una carretera de curvas, nos encontramos muchos coches haciendo “rallis” ilegales. Al subir nos encontramos de cara con 7 coches (1 de ellos casi nos da) y de bajada también nos encontramos varios. Tanto que ya de bajada, nos apartamos a un mirador para que pasaran algunos de esos coches… si tienes poca visibilidad, ¡ve pitando a cada curva!.
Passo Pordoi
El Passo Pordoi está a unos 20 minutos montaña arriba de nuestro hotel en Canazei. Eso nos permitió subir a disfrutar de las vistas de las montañas nevadas a primera hora.
Como ya he dicho antes, le tengo cierto respeto a conducir cuando hay nieve, así que te puedes imaginar como fue la subida… montaña nevada, nieve a los lados de la carretera de curvas… pero nada, ningún problema. El coche se comportó bien y la carretera estaba en buen estado.
Arriba hay un teleférico que te subía aún más arriba, pero con las nubes que había, no valía la pena pagar para luego no ver nada.
En el parking de arriba (gratuito), nos encontramos muchos autobuses llenísimos de gente (la mayoría personas mayores) que iban a pasarlo bien a la nieve 🙂 .
Otras visitas opcionales (para nosotros)
Aquí agrupamos un poco lugares que no quisimos visitar, otros que si visitamos pero que no son nada del otro mundo, y otro que hicimos, era bonito, pero se sale un poco de la ruta:
Tre Cime di Lavadero
Puede que no estés de acuerdo con nosotros, pero nosotros nos negamos a visitar las Tre Cime. A modo resumen: subir a una montaña para hacer un trekking de unas 2h por las tres cimas. El tiempo estaba un poco tontorrón y no estábamos seguros de que aguantara sin llover. Pero el motivo principal de no querer hacerlo no era ese.
El motivo es que hay que pagar un peaje de 30€ para subir en coche y poder aparcar allí. Si alguien dice otro motivo, no digo que no sea cierto, pero a la entrada del peaje hay un cartel que dice que es para aparcar.
Entonces… ¿recomendamos hacerlo? Si te gustan mucho los trekkings y te hace un día espectacular (y no te importa pagar los 30€) adelante, seguro que te van a gustar las vistas. Si te da igual hacer ese trekking o otro, o el tiempo no acompaña… yo me lo saltaría. Hay otras montañas con trekkings que no tienes que pagar nada para aparcar, como el passo Giau.
Cortina d’Ampezzo
Creo que la Cortina d’Ampezzo, en nuestro caso, solo lo recomendaríamos para hacer una parada en ruta y descansar. Cuando fuimos era domingo tarde y estaba todo cerrado. Paseamos un poco, vimos que era bonito, pero tenía muy poca vida…
Eso si, encontramos una cafetería/chocolatería abierta y nos comimos un tiramisú y un chocolate caliente que bueno… delicioso.
Bolzano
Nosotros paramos el lunes al mediodía para ir a comer, antes de encarar las 2h de conducción hasta Sirmione. ¿Vale la pena parar en Bolzano? Bueno, es un buen lugar para descansar entre el aeropuerto y los Dolomitas. Pero no creo que sea un lugar para pasar muchas horas… no creo que merezca una visita muy larga. No llegamos a parar en Trento, pero creo que diría lo mismo.
Sirmione
Quisimos hacer una parada antes de ir al aeropuerto. Lo bonito del lugar es que “es un pueblo metido en el mar”. Calles pequeñitas, llenas de gente, de heladerías y con orilla a casi todos lados. Podríamos decir que es una “islita”. Descansamos por sus calles 1h y media aproximadamente, obviamente, comiendo un helado.
Si tienes tiempo y quieres dejar atrás tanta montaña para disfrutar de algo un poco diferente, este es tu lugar sin ninguna duda.
Nuestra ruta por los Dolomitas
Todo lo que has podido leer arriba es lo que hicimos pero, ¿en qué orden? Ponemos un “día 0” ya que llegamos a Bérgamo un viernes por la noche. No lo contamos de ruta ya que puede que llegues a Bérgamo a primera hora de la mañana y ya inicies la ruta 🙂 .
Nada más por el momento así que… Nos vemos!
